Jane Evelyn Atwood |
Haciendo un paralelo con el genero humano, podríamos pensar que este perro perfectamente podría ser un mendigo, lo que puede ser válido o no, pues el humano mal que bien esta en un ambiente que a sido configurado por su especie para, lo que llama Heidegger, Habitar; el perro considero yo que está en un ambiente extraño a su naturaleza y a sus posibilidades de supervivencia, y aunque han estado en las calles desde los tiempos de los faraones egipcios, nunca habían existido entornos tan estrictamente humanos como las ciudades desde época moderna.
Esta fotografía la encuentro en una columna de opinión del New York Times, que se titula, "Dogs Are People, Too". Que en un principio creo que va en contra vía de la expresión pleonástica o redudante que utilizo para nombrar el blog: un perro es un perro. Pero resulta que no es así pues el concepto de "People" o persona no es exclusivo para los seres humanos, lo que tiene una influencia directa en nuestra relación con las otras especies animales. Éste articulo de Gregory Berns nos habla de estudios que se realizaron al cerebro de los perros sin estar estos anestesiados, lo que según él ofrece otra perspectiva de la naturaleza de estos animales, que lo lleva a pensar que los perros son personas también.
El interés de el nombre de este blog es el de separar a los seres humanos de los perros, de ser cocientes que sus necesidades pueden ser diferentes de las nuestras, y que una vida que nos hace felices a nosotros, puede no hacerlos felices a ellos. Esta diferencia sin embargo no impide que analicemos sin unperro es una persona también, pero entonces ¿qué es una persona?.
Columna de Opinión por GREGORY BERNS en el NYTIMES
En un texto de Carlos Beorlegui, de la Universidad Pontificia Comillas de Madrid, titulado Ética animal e Idea de Persona , se hace referencia a definición o rasgos que debe tener una persona (DENNETT, D., 1976):
a) Las personas son racionales y sujetos de adscripciones intencionales.
b) Por ello, se les debe tratar de un modo apropiado, esto es, con consideración moral.
c) Poseen capacidad de adoptar una actitud recíproca de respeto, por lo que son
considerados como sujetos morales.
d) Pueden usar el lenguaje.
e) Disponen de un tipo específico de conciencia, la autoconciencia, por lo que pueden
formar estados de segundo orden (creencias y deseos sobre creencias y deseos).
Éstos rasgos no excluyen a los animales. Según Beorlegui, lo que hay que hacer revaluar conceptos como racionalidad, intencionalidad, reciprocidad y lenguaje, en los animales. Evitando caer en un antropocentrismo y un especieísmo, que desconozca y nos desligue de nuestra naturaleza animal.
Será posible entonces considerar una persona cánina, o mejor aun que muchos animales pueden ser personas y que tienen unos derechos que debemos respetar así ellos no pueda exigirlos. En el estudio mostrado en el vídeo, establecieron que el cerebro de unperro reacciona de manera similar al humano con ciertos estímulos, en particular con los que tienen que ver con las emociones. Gregory Berns termina su artículo del N.Y. Times con una reflexión muy acertada, sí los adolescentes y niños son protegidos por ciertas leyes por sus características cerebrales, no podrían los perros ser evaluados de la misma manera por la ley.
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